sábado, 29 de diciembre de 2007

Los niños de Barenboim




Daniel Barenboim, y esto lo sabe la población de Berlín y todos los amantes de la música en el planeta Tierra, es un director de orquesta y pianista famoso, amado y reverenciado en la capital alemana, odiado en Israel y considerado un raro apóstol en Oriente Próximo gracias a su idea de haber creado la orquesta West-Eastern Divan, integrada por israelíes, palestinos, egipcios, sirios, libaneses y jordanos.

La cruzada musical de Barenboim todavía no ha logrado imponer la razón, ni menos la reconciliación, entre israelíes y palestinos, pero el intérprete de 65 años nacido en Argentina y criado en Israel tiene una filosofía que le ha ayudado a derribar muros. «La música no acabará con el conflicto, pero sirve para acercar a la gente», repite.

Barenboim, que estuvo a punto de ser declarado persona non grata en Israel en 2001 por atreverse a interpretar con la Staaskapelle pasajes de la ópera Tristán e Isolda de Wagner -el compositor preferido de Hitler-, tiene una idea fija que le ayudó a poner en marcha en Berlín un proyecto casi tan revolucionario como su famosa West-Eastern Divan: una guardería musical.

«Toda nuestra actividad musical pierde su función si abandonamos la educación musical de los niños», dijo cuando inauguró en la capital alemana hace dos años el jardín de infancia, una institución que pretende comunicar a un selecto grupo de niños de entre 3 y 6 años los secretos de la música, la magia de los instrumentos y algo tan banal como el ritmo y la danza.

«La meta es educar a los niños a través de la música», asegura Linda Reisch, responsable de la guardería. «Los niños chupan la música como esponjas, pero no queremos formar pequeños Mozart ni tampoco damos preferencia a niños prodigios». La idea es otra. Los 60 niños que han tenido la suerte de ser admitidos en el centro -«tenemos una lista de espera de 200», advierte Reisch- son los pioneros de un proyecto que pretende enseñarles a convivir con la música. Se trata de que, a través del contacto diario con instrumentos, profesionales y una metodología especial, desarrollen nuevas habilidades que les ayuden a enfrentarse a los desafíos de la vida.

La música predomina en la rutina diaria como una especie de mecanismo que ayuda a los niños a ampliar horizontes. En palabras del maestro, «nos ayuda a entender mejor el mundo». La directora del jardín de infancia admite que «la experiencia nos ha demostrado que nuestros niños son muy despiertos. Saben escuchar, desarrollan habilidades para las matemáticas y se expresan mucho mejor que otros niños de su edad».

Pero Reisch no menciona en voz alta varios aspectos clave del centro, que lo han convertido en tan sólo dos años de existencia en un lugar privilegiado en la capital alemana. En primer lugar, la fama de Daniel Barenboim y el prominente e interesado apoyo de su famosa orquesta, la Staatskapelle.

Concierto privado


Por lo menos una vez a la semana, miembros de la orquesta visitan el 'kindergarten' para enseñar a los niños cómo funcionan los instrumentos y explicarles en un lenguaje que hasta los adultos pueden entender cómo producir una melodía gracias al ágil movimiento de los dedos.

Los niños, a cambio, asisten una vez al mes los ensayos en la famosa Staatsoper, una experiencia que no deja de asombrar a las educadoras a causa de la atención que prestan los pequeños cuando quedan enfrentados al sonido de una orquesta sinfónica o a las arias de los tenores y sopranos.

Cuando visité la guardería para conocer sus instalaciones y su inédita forma de trabajo, un grupo de quince niños recibía la visita de tres músicos de la orquesta de Barenboim. Después de explicar cómo funciona un clarinete, un oboe y una flauta travesera, los músicos interpretaron algunas piezas de compositores clásicos.

El breve concierto privado no dejo a ningún niño indiferente. La música no conoce barreras idiomáticas, y en el kindegarten fundado por Daniel Barenboim la rutina de los instrumentos está enterrando para siempre el mito que hizo creer durante mucho tiempo que la música clásica es algo aburrido para los niños.

El centro, que ocupa un vasto espacio de unos 700 metros cuadrados y que antes de la caída del Muro funcionaba como un jardín de infancia para hijos de diplomáticos acreditados ante el Gobierno de la desaparecida República Democrática, cuenta con nueve educadoras y está abierto desde las ocho de la mañana hasta las seis de la tarde.

Aunque la guardería musical está reconocido por la ciudad de Berlín, la ayuda oficial no alcanza para cubrir todos los gastos, un problema que gracias a su fundador todavía no parece preocupar a nadie. Hace tres años, Barenboim organizó un concierto con el pianista Lang Leng para recaudar fondos que le ayudaron a abrir las puertas de su colegio infantil.

Hace un mes, cuando Barenboim cumplió 65 años, la Staatskapelle ofreció un nuevo recital en beneficio de los pequeños melómanos, con Barenboim al piano y Zubin Mehta como director de orquesta.

sábado, 3 de noviembre de 2007

Niños Chistosos

Los chicos artistas que nos divierten con sus gracias.

Es imperdible la cara de la primera nena cuando imita al malvado George Bush.

viernes, 2 de noviembre de 2007

Trescientos chicos juegan en las ludotecas Madre Teresa

El programa Ludotecas Madre Teresa fue creado por la Asociación Civil Potencialidades con el objetivo de contener y transmitir valores, habilidades y competencias a los chicos en situación de pobreza. Funcionan en los barrios Las Tunas, La Esperanza y San Jorge Nuevo. Entre las tres ludotecas, atienden a unos 300 chicos todas las tardes.

(INFOCÍVICA, Buenos Aires, 2 de noviembre de 2007). “Son espacios de juego y aprendizaje que se construyen con los vecinos y con el aporte de donantes particulares”, cuenta Adriana Mettler, refiriéndose a las ludotecas. Y explica los motivos que llevaron a Potencialidades, la ONG que preside, a crear tres de ellas en barrios marginados: “La idea es que los niños descubran, desarrollen y apliquen sus habilidades, porque todos las tienen, pero muchas veces la situación familiar y la falta de recursos les impide disfrutar de la niñez”, cuenta.

Para lograr este objetivo, Potencialidades contacta a madres de los barrios, les explica el proyecto y las entrena para la instalación de las ludotecas. La última que se abrió fue la del barrio San Jorge Nuevo, en el kilómetro 5,5 de la Ruta 202 en San Fernando.

“La idea nos encantó inmediatamente”, asegura María Benítez, quien abrió el living de su propia casa para que unos 70 chicos se acerquen todas las tardes. “Por ahora, trabajamos acá, porque una propiedad en San Jorge --uno de los barrios más carenciados del distrito-- está entre 12 y 16 mil pesos, una suma muy difícil de alcanzar para nosotras por ahora”, explica Benítez, que trabaja junto a sus cuñadas Stella Maris, Graciela y Roxana Giménez.

El living de la casa de María Benitez rebalsa de juegos de mesa: ajedrez, rompecabezas, juegos de ingenio, y de libros. “Aprendimos a jugar junto a los chicos y también les enseñamos a leer”, sostiene María.

“Yo desafío al ajedrez a cualquiera –grita Braian, de 8 años— aunque prefiero jugar a la pelota los días lindos”. Es que en las ludotecas, también se practican deportes como el fútbol y saltar la soga. “La ludoteca es un lugar para compartir y estar juntos”, sonríe Ayelén, de 9.

“Los días de lluvia pueden resultar más complicados porque los niños siempre prefieren el aire libre, sin embargo vienen igual y eso nos enorgullece porque nuestro objetivo es que puedan disfrutar de ser niños y así alejarlos de la calle y las malas influencias”, asegura María Benítez.

Entre las cuatro, organizan todas las tareas. Graciela se ocupa de los juegos con los más chiquitos: “Este es el sector de los que tienen entre tres y cinco años. Recortamos figuras en papel o cartón con moldes para luego armar móviles”, dice, mientras señala unos 20 móviles que cuelgan del techo.

Por su parte, Stella Maris se dedica al crochet con retazos de tela: “Tejemos mantas, alfombras, carteras y otras artesanías con recortes que nos donaron o que fuimos juntando de los talleres textiles que los tiran en la calle. El problema es que la mayoría de esos lugares están en Capital Federal y nos cuesta mucho llegar hasta allá”, cuenta y agrega: “Podríamos hacer mucho más, pero no tenemos suficiente material, estaría bueno que aquellos fabricantes de ropa nos hagan llegar sus desperdicios, porque en esta ludoteca nada se tira”.

“Nada, pero nada se tira, todo se recrea”, se suman María y Roxana, y muestran unas muñecas de trapo a las que les agregaron unos ojitos de plástico que recogieron de un basural. “Todos colaboran con nosotras, no sólo nuestras familias, sino también los vecinos del barrio”, comentan y dicen que la gente les lleva mucho material para trabajar, por ejemplo latas o botellas de gaseosas con las que hacen floreros para celebraciones especiales como el día del niño o de la madre.

En distintos países, las ludotecas están en auge. En su libro “Las ludotecas”, la pedagoga española María de Borja i Solé explica que esto se debe a una revalorización del juego que, a partir de la industrialización, había perdido terreno frente al concepto del trabajo. En su libro, explica esta tendencia: “Hoy en día, el juego está perdiendo las connotaciones negativas y está siendo revalorizado por su sentido de necesidad y posibilidad humana, y de actividad y actitud de diversión sana y saludable”, escribe. En nuestro país, sin embargo, el desafío está en que los niños de menores recursos tengan las mismas posibilidades de juego, recreación y estimulación que el resto.

En este contexto, las ludotecas de Potencialidades realizan un importante aporte. Graciela, María, Stella Maris y Roxana están entusiasmadas con los logros obtenidos en estos cinco meses, aunque confiesan que mantener la ludoteca no es sencillo y que les gustaría ampliar el servicio. “Para pagar el gas que usamos para la merienda, organizamos ferias dos veces por mes. Los vecinos nos apoyan y parte del dinero recaudado lo estamos ahorrando para comprar un lugar que sea destinado únicamente a la ludoteca”, cuenta María Benítez, pensando en el futuro de su ludoteca.

jueves, 1 de noviembre de 2007

El Fin de Harry Potter

La escritora británica J.K. Rowling, mundialmente famosa por sus novelas sobre el aprendiz de brujo Harry Potter, ha terminado un libro de cuentos de hadas que es, a su vez, mencionado en la última entrega de la saga.

Con «The Tales of Beedle the Bard», título original de esta nueva publicación, la autora ha puesto el broche final a las aventuras del popular mago.

Los niños lectores que aún lloran por la partida del mago, ahora sonríen un poco por las llegadas de las hadas.

Para más información hacer click aquí.

miércoles, 31 de octubre de 2007

Cirque Du Soleil


La mayoría de nosotros ya ha visto en vivo o en DVD.

En nuestro caso, nos prestaron varios DVD para ver las maravillas de este circo y en una de las primeras veces que intentamos verlo, nuestro niño, Santi, se colgó a mirarlo.

En menos de media hora se volvió se declaró fanático número uno de estos muchachos en Argentina.

Por lo cual, es altamente recomendable conseguirse los DVD de Cirque du Soleil. El Preferido de Santi es "Quidam".

Una buena alternativa para salir un poco de Lazy Town y disfrutar todos juntos sin tener que soportar a los plomazos de Hi5.